8 de marzo: Soy de la generación igualdad
8 de marzo: Soy de la generación igualdad, por los derechos de las mujeres es el lema que Naciones Unidas ha utilizado este año para conmemorar el Día Internacional de la Mujer. Una celebración que nos recuerda que son muchos los obstáculos que debemos superar para conseguir la igualdad entre hombres y mujeres, especialmente en lo que respecta a derechos humanos.
Desde nuestra creación, nuestra Fundación ha trabajado para formar a hombres y mujeres, sin ningún tipo de discriminación por raza, sexo o religión, con el único objetivo de mejorar sus condiciones de vida. Haciendo un repaso a todos los proyectos que hemos financiado y/o colaborado, hemos observado que el número de niñas y mujeres beneficiarias es paritario: en algunas ocasiones porque se han tratado de proyectos exclusivamente dedicados a niñas y mujeres; y en muchas otras porque la formación se ha impartido para ambos sexos.
Este 8 de marzo coincide, además, con el décimo aniversario de la creación de ONU Mujeres, la agencia específica centrada en garantizar los derechos de niñas y mujeres, en todo el mundo y conmemora el 25º aniversario de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing (1995), la hoja de ruta más progresista para el empoderamiento de las mujeres y las niñas en todo el mundo.
Las mujeres son clave en las economías menos desarrolladas
Además, en continentes como en África o Latinoamérica, las mujeres juegan un papel fundamental en el sustento y mantenimiento de sus familias, ejerciendo un papel motor. Esta circunstancia obliga a muchas niñas a abandonar la escuela para dedicarse al cuidado del hogar, lo que supone un serio problema. Por ello es necesario impulsar proyectos e iniciativas que garanticen el acceso a la educación de las que hoy son niñas, y de mujeres con cargas familiares, como clave para erradicar la pobreza.
Naciones Unidas afirma que «El consenso que está surgiendo a nivel mundial es que, a pesar de algunos progresos, el cambio real ha sido desesperadamente lento para la mayoría de las mujeres y niñas en el mundo. Al día de hoy, ningún país puede pretender que ha alcanzado la igualdad de género. Hay una serie de obstáculos que permanecen sin cambios. Las mujeres y las niñas siguen siendo infravaloradas; trabajan más, ganan menos y tienen menos opciones; y sufren múltiples formas de violencia en el hogar y en espacios públicos. Además, existe una amenaza significativa de reversión de los logros feministas que tanto esfuerzo costó conseguir».
Desde Fundación Elosúa Rojo trabajamos, día a día, para alcanzar la igualdad en la educación, en el mercado laboral y en una sociedad más justa y equitativa.
