Pandemia… y brecha digital
Pandemia…y brecha digital ¿Y qué tiene que ver una cosa con la otra? Mucho, porque la falta de acceso a internet de muchos niños y niñas ha impedido que continuasen con sus clases durante estos últimos meses de confinamiento.
El cierre de las escuelas, por la crisis del COVID-19 ha puesto de manifiesto la desigualdad de aquellos hogares que carecen de acceso a las tecnologías de la información. L;os profesores se las han tenido que ingeniar para seguir impartiendo sus clases on line. Sin embargo, no todos han podido seguir su formación o recibir y enviar sus tareas por carecer de conexión a internet o de ordenador, tablet o teléfono móvil. Según datos recabados por UNICEF, esta circunstancia se produce en un 20% más en hogares con rangos de ingresos bajos.
El virus de la desigualdad
El pasado mes de mayo Save the Children publicó un informe que analizaba el impacto del cierre de las escuelas en los niños más desfavorecidos. Esta organización solicitó un plan de recuperación educativa basado en la equidad y el bienestar psico-social para que ningún estudiante se quede atrás.
Han sido muchas las iniciativas puestas en marcha de reparto de tablets llevadas a cabo por Fundación Telefónica, a través de las comunidades autónomas, o UNICEF. INDRA, en colaboración con la Asociación Española de Fundaciones, ha donado un total de 7.336 tablets que han sido repartidas por Cruz Roja y 28 fundaciones que trabajan en ámbitos educativos. Pero está claro que no han sido suficientes. Muchos niños han tenido que esperar a que sus padres llegasen a casa, al final del día, para conectarse con el teléfono móvil. O algunos profesores han contado con la ayuda de Protección Civil para llevar las tareas impresas a los niños «desconectados». ¿Qué consecuencias traerá la desconexión de este grupo de población? ¿Qué ocurrirá el próximo curso si se va a optar por la opción semi-presencial? Sin duda el COVID-19 ha puesto encima de la mesa muchos problemas que requieren solución para garantizar el derecho fundamental de acceso universal a la educación.
Brecha digital en adultos
Según un estudio publicado por el sindicato UGT, la brecha digital afecta a un 45% de la población de nuestro país. Además de convertirse en un problema sistémico, la falta de habilidades digitales impide al sector industrial español iniciar proyectos de reconversión hacia la economía digital.
Y es que cerca de 4,4 millones de españoles nunca han utilizado internet y más de 2,2 millones de viviendas carecen de conexión a la Red. Las cifras son aún más alarmantes cuando discriminamos por género: el 60% de los desconectados españoles son mujeres; por formación académica: el 60% carece de estudios secundarios.
Capacitación digital acelerada
Esta carencia de competencias digitales la hemos podido comprobar de forma directa en el curso de atención socio-sanitaria a personas dependientes en instituciones sociales. Financiamos este proyecto desde 2016 que imparte Mensajeros de la Paz en Madrid. El confinamiento interrumpió las clases que finalmente se han podido reanudar on line previa autorización de la Comunidad de Madrid. El hecho de que los alumnos careciesen de conocimientos digitales obligó a los profesores a impartir un taller acelerado y a entregar tablets para que todos pudieran conectarse a las clases.
Está claro que el mundo no estaba preparado para una pandemia de esta magnitud. Y a la tristeza por la pérdida de cientos de miles de vidas, nos enfrentamos a serios problemas económicos, laborales y sociales que desgraciadamente contribuirán a incrementar la desigualdad.