Día de los Abuelos: un homenaje al amor que perdura
El Día de los Abuelos es un homenaje al amor que perdura y a la dedicación de quienes han cuidado de generaciones enteras. Cada 26 de julio, celebramos esta fecha impulsada por Mensajeros de la Paz, que busca reconocer el papel fundamental de los abuelos y abuelas en nuestras familias y en la sociedad.
Esta jornada nació con un propósito claro: visibilizar a las personas mayores y agradecerles su entrega constante, su tiempo y su cariño. En muchos hogares, los abuelos siguen siendo un apoyo imprescindible en la educación, el cuidado y el acompañamiento emocional de los más jóvenes.
Reconocer su papel en la sociedad
Desde la Fundación Miguel Ángel Elosúa Rojo, nos unimos a esta celebración convencidos de que las personas mayores son un pilar esencial en la construcción de comunidades más solidarias, humanas y sostenibles. Su experiencia vital y su capacidad de resiliencia representan una fuente de aprendizaje para todos.
Además, el envejecimiento de la población nos invita a reflexionar sobre cómo queremos que sea esta etapa de la vida. Apostamos por un envejecimiento activo, en el que las personas mayores sigan participando en la vida social y compartiendo su sabiduría con las nuevas generaciones.
Por ello, apoyar programas que promueven la autonomía, la formación y la participación de los mayores no es solo una cuestión de justicia, sino también de futuro.
Formación para un cuidado más humano
En colaboración con la Fundación Mensajeros de la Paz, desarrollamos, desde 2016, el proyecto de formación a personas en riesgo de exclusión para incorporarse al mercado laboral, en concreto en centros sociosanitarios.
El programa está diseñado para mejorar la capacitación de los equipos que atienden a personas mayores, con contenidos centrados en la atención integral, el respeto a la dignidad y el acompañamiento emocional.
Gracias a esta iniciativa, cientos de personas han fortalecido sus competencias técnicas y humanas, contribuyendo a una atención más empática y personalizada. Y hemos contribuido a mejorar la calidad de vida de los alumnos y alumnos, facilitándoles las competencias profesionales necesarias para incorporarse al mercado laboral.
Un compromiso que va más allá de un día
El Día de los Abuelos también nos recuerda que no basta con agradecer una vez al año. Es fundamental seguir construyendo entornos donde las personas mayores se sientan escuchadas, útiles y respetadas.
La soledad no deseada afecta a miles de mayores en España. Combatirla requiere no sólo recursos, sino también conciencia social. Por eso, animamos a todas las personas a mantener el vínculo con sus mayores, a dedicarles tiempo y atención, y a reconocer el valor de su presencia.
Un simple gesto —una visita, una llamada, una conversación— puede tener un impacto enorme en su bienestar emocional.
Nuestro compromiso continúa
Con vuestra ayuda, la Fundación Miguel Ángel Elosúa Rojo y Mensajeros de la Paz seguiremos trabajando para impulsar la formación, el acompañamiento y el reconocimiento que las personas mayores merecen.
Porque el amor de los abuelos no se mide en años, sino en huellas. Y este día, más que una celebración, es una oportunidad para devolverles un poco de todo lo que nos han dado.



